Ruta en Raquetas de nieve

El pasado invierno hice con unos amigos una excursión en raquetas de nieve en la sierra norte de Madrid, saliendo de Navacerrada. Estuvimos aproximadamente unas 3 horas durante la mañana en una ruta bastante sencilla que se complicó para los que tenían más experiencia o buscaban una actividad mayor.

Para poder buscar la experiencia miré en yumping.com y desde ahí seleccioné una de las empresas que ofrecían la actividad, que recuerdo no fue muy cara.

Como yo no soy muy aficionada a la nieve no tenía equipo necesario, pero fui bien abrigada, con una cazadora impermeable (como en algunos tramos puedes rodar o deslizarte sentados cuesta abajo puedes mojarte), unas zapatillas cómodas, gorro, guantes e importantísimo gafas de sol. Si se tiene botas de montaña mejor que mejor, aunque las raquetas se ajustan a cualquier tipo de calzado.

Teníamos dos monitores que nos explicaron a todos cómo nos debíamos poner las raquetas, nos entregaron unos bastones y en unos minutos nos hicimos con el funcionamiento del equipo. Es muy sencillo, más de lo que puede parecer en un primer momento.

La actividad, no voy a mentir, es bastante cansada, pero también es 100% recomendable, pues se llega a un montón de rincones de la montaña que como están nevados son sencillamente perfectos. Después del esfuerzo llegar a la cima compensa y merece mucho la pena.

A lo largo del trayecto el guía nos fue preguntando en todo momento cómo íbamos, si estábamos muy cansados, si queríamos ir por un camino fácil o por uno más divertido… Todos optamos por el divertido y nos deslizamos ladera abajo en una montaña, lo que fue muy gracioso!

También paramos a mitad del recorrido para tomar un tentempié (aconsejo llevar una mochila con algo de comer como un sándwich, fruta o alguna barrita energética y agua, que aunque parezca que haga frío y no se tenga sed, como se está realizando ejercicio físico puede dar lugar a la deshidratación) e hicimos bastantes fotos durante todo el camino, ya que el paseo es bastante tranquilo.   

Eso sí, tras algo más de 2 horas y media caminando estaba tan cansada que cuando el monitor preguntó si alguien quería seguir subiendo una última cima no pude ir y algunos nos quedamos esperando abajo. Pero los que fueron dijeron que alucinaron con las vistas.

Por lo tanto, tras casi media jornada haciendo esta excursión recomiendo mucho su práctica, que es genial para ir con amigos, con la pareja o con compañeros de trabajo. Ah, también había una parejita haciendo la ruta con su hija de 9 años y sin problema, aunque más adelante optaron por ir en un camino más sencillo.

Por cierto, recomiendo que si vais a ir os peguéis el madrugón y estéis allí a primerísima hora, porque luego se llena de gente, los aparcamientos se ponen hasta los topes y ¡es imposible dejar el coche si no!