DE POSADA DE VALDEÓN A CAÍN. (SENDA DEL CARES)

Lugar: León (España) -Picos de Europa-

Itinerario: de Posada de Valdeón (930 m.) a Caín (460 m.).

Distancia: 18 km. ida y vuelta.

Desnivel: unos 500 m. de bajada y otros tantos de subida.

Tiempo: entre 5-6 horas (hay mucho que ver).

Dificultad: fácil.

Es la travesía más popular de los Picos de Europa y recorre el deslinde natural entre los macizos occidental y central, propiciado por las aguas del río Cares.

Muchas son las variantes que tiene esta ruta, de Posada a Caín, de Poncebos a Caín, de Posada a Poncebos o viceversa, ida y vuelta o solo ida, etc. Lo mejor sería hacerla entera y saborear plenamente su grandiosidad.

Nosotros vamos a realizar la de Posada de Valdeón a Caín (ida y vuelta).

Posada, es un bonito pueblo de montaña leones situado en un espectacular valle, que tiene las llaves de acceso por la vertiente meridional a los macizos occidental y central de los Picos de Europa.

Posada de Valdeón protegida por lo Picos del Friero por un lado y por los de Pambuches y Torres de Arestas por otro, es un espectáculo por sí mismo, un disfrute para la vista, que hará, que cualquier visitante que se acerque al él no salga defraudado.

Comenzamos nuestra marcha por un lado del Ayuntamiento, por senda marcada, teniendo como primer objetivo el Mirador del Tombo. Cruzando la parte baja del pueblo, atravesamos un puente que nos da acceso al camino del Bustio por el que, junto al embalse, llegaremos a Cordiñanes.

El paisaje es verdaderamente hermoso, y charlando sin darnos cuenta, divisamos Cordiñanes y llegamos al mirador.

El Mirador de Tombo, es un homenaje a Julián Delgado Úbeda (1.895-1.962), que fue mucho tiempo Presidente de la Federación de Montaña y gran impulsor de este deporte en nuestro país.

Desde el mirador se puede apreciar lo que son los Picos de Europa en todo su esplendor y muy cerca de nosotros podemos observar la esbelta aguja Mª Carmen o Pica del Castro.

Continuamos nuestra marcha y en un vertiginoso descenso llegamos a la majada de Sesanes, por donde cruzando el río llegaríamos a la Ermita de Corona pero no nos desviamos (ya la veremos por una variante del camino a la vuelta) y nos dirigimos al Chorco de los Lobos por una carretera muy estrecha para los coches (aunque poco a poco la van arreglando).

De pronto aparece ante nosotros “El Chorco”, construcción que a modo de pozo era el punto final de un ingenioso sistema de empalizadas (cuando se hacían las batidas de los lobos) en el que iban acorralando al lobo hasta que se caía en el y con palos y piedras se ponía final a su vida (siglo XVll). De verdad que el lugar es sobrecogedor.

Continuamos y llegamos a una apacible vega donde el río Peguera se une al Cares, en este lugar se encuentran las majadas de las Vegas, la Peguera y Santiján, cruzamos el puente Capozo y un poco más adelante vemos el puente, que a la vuelta nos llevara por otro camino a la Ermita de Corona.

Seguimos nuestro camino y cruzando el puente de Canceles pasamos a la margen derecha del río Cares, que baja impetuoso hasta Caín, y por la garganta de los Caínes, escoltados por paredes verticales seguimos descendiendo hasta nuestro punto de destino.

En un entorno espectacular se encuentra Caín, situado a 460 m. de altura, es un pequeño pueblo que gracias a los senderistas que hacen esta ruta, ha sabido salir de su aislamiento, y por su situación, en este pequeño valle entre montañas, ha hecho que florezcan multitud de comercios entre sus vecinos; restaurantes, bares, supermercados, tiendas de recuerdos, etc. Convirtiéndole en uno de los pueblos más visitados de “Picos”.

En Caín nació Gregorio Pérez Demaría, el Cainejo, genuino representante de los hombres de estas montañas, que acompañó a Don Pedro Pidal en la conquista del Naranjo de Bulnes (5-8-1904).

Como tenemos pensado hacer la de Poncebos a Caín una próxima vez, nosotros terminamos aquí, pero si vosotros sois de los que, por lo que sea, a lo mejor no volvéis por la zona continuad 4-5 km. más porque es un tramo que no debéis dejar de ver.

Después de comer y descansar un rato, comenzamos nuestra vuelta a Posada enfilando la garganta de los Caínes en fuerte ascensión y antes de llegar al puente del río Peguera, cruzamos el puente que esta a nuestra izquierda, que nos hará coger una senda por la que llegaremos rápidamente a la Ermita de Corona, por Santijan.

La Ermita se halla situada en una hermosa campa y según la tradición, aquí fue coronado Rey, Don Pelayo, hecho de capital importancia en la historia de España.

Aún se encuentran cuevas alrededor de este lugar que servían de refugio a los pastores en épocas pasadas.

Seguimos nuestro camino y cruzando el puente de la majada de Sesanes, volvemos a la carretera y regresamos a Valdeón, habiendo disfrutado mucho de esta magnífica excursión y esperando ya, la próxima, que nos llevará desde Poncebos a Caín.

Cuando hagáis esta ruta si podéis, hacerlo fuera de los fines de semana de verano ya que se amontona mucha gente por el camino.

Buen viaje y buena senda.