Grandioso, inmenso, bonito, multicolor,.... esos algunos de los comentarios que escuchaqbamos nada más llegar a los miradores. Todo empezó así. Estabamos en Las Vegas,  (ver Las Vegas en un viaje loco)  y la excursión al Gran Cañon la teníamos reservada desde España para el día siguiente a nuestra llegada a Nevada. En caso de que todo nos saliera bien, nos recogería un autobus a las 6 de la mañana en el parking del hotel de Las Vegas, el autobus pasará por los distintos hoteles para seguir recogiendo gente, nos llevarían al aeropuerto McCarran y desde allí, en avioneta nos llevarían al Gran Cañon, hacemos la visita, dorminos en el hotel y a la mañana siguiente, de nuevo a Las Vegas.

Pero, como ya he dicho, eso sería si todo va bien y si no perdéis el autobus que os lleva a la excursión. Y eso fué lo que nos pasó, y así fué como lo resolvímos. Cuando llegamos al Parking, el autobus se acababa de ir con lo cual nos la tuvimos que ingeniar para ir a la excursion por nuestra cuenta. Cogímos un Taxi y le mostramos la dirección de donde teníamos que ir. El taxista entendió que nos tenía que llevar a la central de la agencia en vez de el aeropuerto. En la central, para variar, como en el resto de las vegas, nadie hablaba español, así que en nuestro ingles del Turia, jeje, le explicamos que perdimos el autobus y que donde realmente queriamos ir era al gran cañon. Hablamos con la chica de la agencia y nos preparó una excursión para nosotros sólos. (el dinero no lo vais a perder si fallais en la excursión, ya se apañan ellos para que vayas). Así que lo hicimos al revés. Cruzamos por la tarde del estado de Nevada al de Arizona en una avioneta en la que sólo ibamos nosotros cuatro, mi novia, y dos amigos que eran hermanos y nos llevaron al Hotel "National Park Big Pine" e hicimos un poco de trabajo de campo. Fuimos a por souvenirs y a cenar.

Todo está cerca de los hoteles que hay en el National Park, y no tendréis problemas para comprar y comer. Una camiseta de manga larga para salir a pasear por la noche, aunque parezca mentira, no os vendrá nada mal. A la mañana siguiente nos levantamos y fuímos a por el bus que nos llevaría al Gran Cañon, y cual fué nuestra sorpresa, cuando vimos en la mismísima puerta del hotel una serie de ciervos y ardillas que se nos acercaban como para pedirnos comida y para que los acariciaramos, fué una experiencia maravillosa ver que en vez de asustarse, se acercaban a nosotros.  El autobus nos llevó a todos a desayunar a un bar antes de salir para el Gran Cañon, y por fin...

El Gran Cañon tiene unos 446 kilometros de largo, y entre 6 y 20 kilometros de ancho en sus cordilleras, con lo que para ver algun paisaje distinto del que estais viendo, teneis que marchar bastantes kilometros a la derecha o a la izquierda de donde os encontrais, pero si no pensais en ello, el autobus os deja en un lugar ya pensado para que os deleiteis con la mirada. Imaginaros un precipicio que casi no ves el suelo, miráis a la derecha y no ves más que una gran grieta sin fin con multitud de colores en sus distintas capas de tierra que acaban formando como una especie de escalera gigante hasta llegar al fondo del mismo, y a la izquierda, por supuesto, ídem de lo mismo. Después de ver ésta maravilla del mundo durante un par de horas, hacer las correspondientes fotos y comprar los souvenirs de turno,  nos volvímos al autobus para regresar al aeropuerto y volver a Las Vegas, no sin antes pasar por un cine IMAX que había cerca del aeropuerto y ver un documental sobre el Gran Cañon.

La excursión más simple, que es la que nosotros teniamos, incluía: la ida en avioneta al Parque Nacional del Gran Cañon, el hotel, el desayuno, la excurion a los miradores, el cine IMAX y la vuelta a Las Vegas. No os puedo comentar más porque ésta fué una excursion rápida dentro de nuestro extenso viaje por toda la costa oeste de EEUU. Tambien será el diario más corto, porque... de donde no hay no se puede sacar y no voy a poner cosas que no hice, jeje. Pero si os diré varias cosas como que NADIE en toda la excursion hablaba en español, con lo que el ingles es un lenguaje imprescindible para andar por aquí. En el aeropuesrto había gente que continuaba la excursión y cogia un helicoptero para bajar abajo del Gran Cañon, luego habian otros que despues de bajar, iban en barca por los rápidos del rio Colorado. Vamos, que aparte de lo que hicimos nosotros, teneis una amplia oferta para viajar y disfrutar del Gran Cañon.

De aquí salimos para Death Valley, San Francisco, California y démás sitios que ya os contaré. Espero que disfrutéis más de mis otros diarios que de éste, también son más experiencias. Fué corto, pero intenso y muy divertido.