Viajero desde
23/12/2007
Nick: ORC |
Viajar es despegarte de tu mundo por un tiempo.
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Escribe el relato: Luis Fernando Leyton
El corazón de Bolivia latió mas fuerte que nunca con el encuentro nacional de 4x4 promovido por el OFF ROAD CLUB BOLIVIA. Participaron representantes de
Villa Tunari y sus alrededores en el departamento de Cochabamba fue el escenario elegido para recorrer y conocer a profundidad en este encuentro nacional de vehículos 4x4. Un escenario geográfico ideal y estratégico en el país para darse cita representantes de los departamentos que participaron de esta convocatoria, demostrando de lejos por que es el Club mas importante del país.
La partida de los diferentes grupos fue el sábado 28 de abril. La mayoría de los autos tuvieron su encuentro en la ciudad de Cochabamba donde se hizo la reagrupación necesaria y asumieron la guía los representantes del O.R.C. BOLIVIA - Cochabamba, Mauricio Vera y Enrique Cordova para ingresar al trópico cochabambino. Por su parte el grupo de Santa Cruz tuvo un día mas relajado, saliendo ese mismo día temprano en la mañana, a ritmo moderado con parada obligatoria en las cabañas del río Yapacani para el almuerzo, llegando a Villa Tunari a las 3 de la tarde con tiempo suficiente para coordinar y tener todo listo para la llegada del resto del grupo en los dos hoteles que fueron tomados para recibir a los participantes.
Tras la llegada general, acomodamiento, reparto de habitaciones, hubo la cena de información general de la travesía dando a conocer los detalles restantes, coordinar con el guía y compartir entre asistentes.
Dado que la travesía más larga estaba prevista para el día siguiente (domingo 29), era oportuno para los participantes recargar energía. El viaje especialmente para la delegación de
La salida del día siguiente se produjo con puntualidad. El objetivo era el de recorrer las sendas y caminos alternativos del Parque Nacional Isiboro Sécure, en un recorrido interesante para conocer a fondo la zona por los parajes mas inhóspitos y menos visitados del Chapare. Sendas tupidas, cerradas por la vegetación en la que a momentos era necesario bajar con machetes y abrir camino, cruce de ríos, transitar por zonas fruteras y pequeñas poblaciones donde la influencia política del partido actual de gobierno es notable - es bueno destacar que el actual presidente de la república surgió gracias a su carrera política iniciada en esta zona -.
Hubo que tomar pontones que crucen los vehículos el río Chapare para llegar a la zona por excelencia mas importante para el cultivo de plátano (banano) plantados únicamente para exportación. Se hizo sentir y extrañar la ausencia de barro, un elemento que era esperado por todos en este día, pero estas ganas debían esperar.
Destacable la labor en el día de Fernando Paredez - líder - y Fabrizio San Martín - coordinador - ambos encargados de guiar y cerrar la caravana que supieron "ponerse al hombro" toda el grupo.
La llegada de la noche sirvió para la cena en grupo, posterior reunión entre participantes en Villa Tunari y planificación del día siguiente surgiendo un cambio de planes en base a la actividad original.
Tras un descanso reparador, la organización evaluó lo planificado para el tercer día; y ante la certeza de encontrarse con un panorama similar al día anterior, se adopto la decisión de tomar otra ruta mas cercana, pero mucho más exigente para poner a prueba la capacidad conductiva y de los vehículos; una ruta de arena que avanzaba paralela al río y guardaba grandes emociones.
De entrada la exigencia se presento a los expedicionarios. La bajada al río llevaba años sin el paso de un vehículo (es probable que nuestro paso hace siete años haya sido la ultima vez que vio un auto en esa zona). Fueron aproximadamente
Se emplearon para este trabajo palas, picotas, hachas, machetes y un equipo humano trabajando para lograr el objetivo trazado de llegar hasta el río.
En este trabajo, el grupo se encontró con otro tipo de inconvenientes:
En la zona habitaban grandes hormigas de una mordida muy fuerte que hizo brincar a mas de uno; y por otro lado, entre los arbustos a remover, espinas de gran tamaño que eran un riesgo para la pintura de los autos; pero cuando hacia contacto directo con la piel, producía un singular escozor.
Un emocionante paso que dio sus frutos, cuando todos los vehículos llegaron a la orilla del río y su playa de blanca arena, donde todos tuvieron su premio en el merecido refresco con el baño en las refrescantes aguas del río.
Posteriormente vino la conducción 4x4 en arena; al ser mediodía, con el sol encima, era sin dudas la peor hora para hacerlo. Esto por la facilidad con la que se clavaban los vehículos en la arena.
Hubo un momento, que eran hasta seis los vehículos plantados. Nuevamente las palas tuvieron que cumplir su función para el desatasco. Con gatos mecánicos e hidráulicos, para elevar el auto, planchas y maderas para mejorar la tracción. Los que mas trabajo dieron, fueron los autos cuyas coronas llegaron a enterrarse en la arena, obligando a duplicar esfuerzos.
El objetivo de encontrar mayor grado de dificultad para el manejo, fue cubierto ampliamente, y sólo quedaba el último paso para el cierre oficial del encuentro de 4x4. Un asado en el Parque de diversiones llamado “La Jungla”.
Este parque, dio la oportunidad a la gente de distraerse y disfrutar sus instalaciones. Finalmente para la noche en el cierre oficial del encuentro se aprovecho de hacer la evaluación, que, desde todo punto es positivo, para próximos encuentros nacionales.
Al día siguiente la partida fue temprano rumbo a las ciudades de origen, con la promesa de repetir vivencias similares en próxima oportunidad