SITUACIÓN
Jaca, es la capital de la Comarca de la Jacetania, en la provincia de Huesca, territorio histórico que se extiende sobre la vertiente noroccidental de Aragón.

La ciudad de Jaca es, sin duda, la capital del Pirineo Aragonés. Su historia, su ubicación y su importancia poblacional, hacen de ella un importante centro de servicios y una capital turística de primer orden. La ciudad antigua está rodeada de modernas urbanizaciones que acogen a miles de turistas a lo largo del año.

QUE VISITAR
La visita a la ciudad deberá comenzar siempre en la Catedral, magnífico ejemplo del románico, que incluso generó una subdivisión – el románico jaqués – dada la singularidad del ajedrezado que la piedra de los aleros de numerosos templos albergaba.

La Catedral de Jaca comenzó a edificarse en el  siglo Xl, a escasos metros del templo de San Pedro el Viejo, del que no se conserva sino su estructura, bajo la Plaza de San Pedro, estudiada por los arqueólogos hace algunos años. De hecho, el pavimento de dicha plaza reproduce la silueta del antiguo templo prerrománico. Su fundación se fecha, a comienzos del siglo X, tras la conquista de la ciudad y su amurallamiento.

La Catedral alberga en su interior el Museo Diocesano, que algunos expertos han calificado como “La Capilla Sixtina de la pintura románica”.

La arteria principal de Jaca es la Calle Mayor, vía que reúne algunos de los principales edificios de la ciudad, como la hermosa Casa Consistorial, edificio del siglo XVl, con fachada plateresca y patio renacentista.

En el resto de la calles, se levantaron numerosas casas de la burguesía jacetana fechadas, muchas de ellas, a comienzos del siglo XX. Desde allí se puede comenzar un paseo que nos llevará al resto de iglesias de la ciudad – Santiago, Salvador, el Carmen- o a los restos de la Ermita de Sarsa, que adornan el final de la avenida Oroel.

Una de las visitas obligadas, es la recoleta Plaza del Marqués de la Cadena y la Torre del Reloj, edificio del gótico civil levantado a mediados del siglo XV y que es conocido popularmente como Torre de la Cárcel, por haber tenido ese cometido desde que el Ayuntamiento lo adquiriera en 1599, para ubicar en ella el reloj de la Catedral.

La Ciudadela es, sin duda, el edificio emblemático de Jaca. ¿Qué tiene en común la ciudad de Jaca, con la belga Lieja o la portuaria de El Callao, en el lejano Perú?. Aparentemente nada, aunque existe un detalle que las hermana entre ellas: en las tres ciudades existe un monumento, de similares características, que resume la peripecia histórica de una época convulsa. La Ciudadela de Jaca o Castillo de San Pedro, es exactamente igual a la de El Callao – aunque esta se encuentra a orillas del océano – y a la de Lieja.

Se trata de un edificio del siglo XVl, levantado por orden de Felipe ll, siguiendo las técnicas constructivas de defensa más avanzadas de la época: planta poligonal en forma de pentágono, con baluartes en las esquinas y de construcción semienterrada con un foso, lo que permitía una defensa perfecta por todos los flancos.

La Ciudadela de Jaca encierra en su interior el Museo de  Miniaturas Militares, que cuenta con una colección de 35.000 miniaturas de plomo, de las que se exponen unas 32.000 divididas en 23 dioramas.

Así, a las pequeñas figuras de plomo de los soldados se le suman árboles, edificios, montañas y otras maquetas que complementan a la perfección el montaje dotándolo de gran realismo.

Egipto y Cleopatra, las legiones romanas- con la aldea gala de Axterix como guiño a los pequeños-, Atila y sus ejércitos, las cruzadas, el siglo XVll, la Corona de Aragón, las guerras napoleónicas, el salvaje Oeste, las guerras mundiales, la guerra civil española y, por último, las misiones de paz, en las diversas partes del mundo, componen una divertida forma de acercarse a la historia.

Otro edificio jaqués que avala el carácter fronterizo de la ciudad, es el Fuerte del Rapitán, levantado a finales del siglo XlX en uno de los cerros que rodean la ciudad, a 1.142 m. de altitud y con espléndidas vistas hacia el sur.

Para finalizar la estancia en Jaca, proponemos conocer sus zonas verdes. Los parques de la ciudad permiten un agradable paseo a la sombra de los árboles. Como ejemplo, proponemos el más antiguo, el Paseo de la Constitución, que enlaza con el Paseo de la Cantera y sus vistas sobre el río Aragón. Al final del mismo alcanzamos el Puente Medieval de San Miguel (s.XV).

Sin embargo, la zona verde por excelencia de Jaca es el Monte Oroel, que con sus 1.770 m. de altitud se ha convertido en el símbolo de la ciudad.

FIESTAS
El Primer viernes de mayo. Nadie discute si es leyenda o realidad. Nadie cuestiona su origen porque, quizá, sea lo menos importante.

Fiestas Patronales. Santa Orosia (25 de junio) y San Pedro (29 de junio). De entre todos, el acto de la "Veneración" de los restos de Santa Orosia, es el más interesante y principal en la mañana del 25 de junio. Los danzantes de Jaca que durante el acto no cesan de bailar, dan testimonio de la importancia del instante.

El Festival Folklórico de los Pirineos. Es como si el mundo decidiera reunirse, durante una semana, para bailar en el Pirineo. Cada dos años, los impares, durante la primera semana del mes de agosto, la ciudad de Jaca alberga uno de los encuentros folclóricos más multitudinarios.

Jaca, magnífica ciudad en el Pirineo Aragonés, su visita para cualquier viajero, se hace casi imprescindible.

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