Daroca (Zaragoza) |
SITUACIÓN
Daroca es una ciudad y municipio de la provincia de Zaragoza, Comunidad Autónoma de Aragón. Se encuentra situada en la depresión del río Jiloca y es la capital de la comarca Campo de Daroca.
Daroca, es un cruce de caminos, ciudad libre en un mundo feudal, frontera aragonesa con el Islam o Castilla. Musulmanes, judíos y cristianos han escrito sus capítulos incontables, muchos olvidados ya, otros más vivos que nunca. Daroca es también final del camino, una vez que los Santos Corporales decidieron descansar eternamente entre sus muros y el municipio se convirtió en lugar de peregrinaje.
El recinto amurallado que protege el Casco Histórico es el más extenso de Aragón, lo que revela el carácter estratégico del enclave.
Por ello y por mucho más, Daroca es una de las ciudades más importantes en el devenir histórico de Aragón, lo que prueba el privilegiado patrimonio monumental y artístico que conserva. Pasear por sus calles cargadas de siglos es una experiencia inolvidable que nos permitirá descubrir acaso alguno de los miles de secretos que guardan las portentosas murallas.
Difícil parecería traspasar esos muros, tan amplios como el pasado de la ciudad, si en ellos no se abrieran las hermosas puertas que invitan a que entremos. Una vez en su interior, Daroca nos contará, orgullosa y en voz baja, alguna de sus historias.
El recinto amurallado de Daroca, construido en tapial, ladrillo y piedra, se convirtió en el más extenso de Aragón, con más de cuatro kilómetros de largo, y a él se sumaron tres castillos, más de cien torreones y varias puertas, algunas de ellas monumentales.
A partir del siglo XV la ciudad contó, además, con diez iglesias, seis conventos y varias decenas de palacios y casas palaciegas. Las heridas del tiempo no han permitido que los restos de tan deslumbrante patrimonio nos hayan llegado en su totalidad y plenitud, algo que, no obstante, no impide que Daroca siga siendo una de las poblaciones culturalmente más ricas de todo Aragón.
QUE VISITAR
SAN MIGUEL. Este templo románico edificado en el siglo XII, guarda en su interior tinas importantes pinturas góticas. Se utiliza como sala de conciertos y para realizar actos culturales.
PUERTA ALTA. Como su nombre indica, es el portal de la muralla que daba acceso desde la parre más alta de la ciudad, junto a la carretera de Zaragoza. Data del siglo XVI, aunque fue transformada en siglos posteriores.
PUERTA BAJA. En el otro extremo de la calle Mayor, la Puerta Baja es la más monumental de la ciudad y uno de sus símbolos principales. Comenzada en el siglo XIII, su aspecto almenado data de mediados del XV. En su interior se ubica el Centro de Estudios Darocenses.
CASTILLO MAYOR. La fortaleza de origen árabe articuló un complejo sistema defensivo con múltiples torreones que pueden recorrerse a 10 largo de kilómetros de murallas.
SAN JUAN. En este templo románico puede estar la clave del nacimiento del Mudéjar. Comenzado en piedra sillar en el siglo XII, se culmina un siglo más tarde por alarifes musulmanes en ladrillo, aunque continuando el estilo románico.
MUSEO COMARCAL HOSPITAL DE SANTO DOMINGO. Este edificio del siglo XVI alberga en su interior desde materiales arqueológicos hasta una gran colección de obras de arte religioso.
MUSEO DE LOS CORPORALES. En la misma colegiata de Santa María, el Museo de la Pastelería, idóneo para descubrir los exquisitos lamines darocenses, y, por último, el Museo Comarcal, cuya sede es el Hospital de Santo Domingo, del siglo XVI.
LA VISITA
Recorrer las calles de Daroca significa el regreso a las épocas más esplendorosas de su pasado y ya sus puertas nos reciben mostrando con su porte la importancia de la ciudad.
La Puerta Baja, de sólidos sillares, daba la bienvenida a los viajeros procedentes de Levante y Castilla con sus robustas torres rematadas por almenas, construidas en el siglo XVI.
La Puerta Alta, por su parte, es de comienzos del siglo XVI y se levantó en sustitución de otra anterior. Un escudo de la ciudad destaca en el edificio, sobre el arco apuntado de buena sillería.
Queda todavía el Portal de Valencia, flanqueado por un sólido torreón de sillar, y la Puerta del Arrabal, conocida popularmente como portillo de San Valero.
Uno de los encantos de Daroca es recorrer sus Murallas, construidas en distintas épocas, hasta el antiguo Castillo, donde encontramos restos de la primitiva alcazaba musulmana y desde el que se puede disfrutar de una impresionante panorámica del conjunto urbano. Otro tramo recomendado es el que se ubica entre la Puerta Alta, el cerro de San Cristóbal y la Puerta Baja, tal vez el más interesante del recinto.
Ya en la localidad, el templo más importante y suntuoso de los que se levantan es la Colegiata de Santa María, en cuyo interior, de gran riqueza ornamental, destaca el baldaquino del altar mayor, dedicado a la Asunción, así como el estupendo órgano del siglo XlV.
Varios son los templos que merecen una visita. Entre ellos, San Juan y Santo Domingo tienen la particularidad de que su construcción se inició en el siglo XII, en estilo Románico, concluyéndose en el XIII con técnicas mudéjares. Por ese motivo, ambos son una referencia única de la transición entre los dos estilos arquitectónicos.
Del Románico es asimismo la Iglesia de San Miguel, con sus sólidos muros de sillería y que esconde una auténtica joya en las paredes interiores del ábside: sus hermosas pinturas góticas, dignas de ser contempladas durante largo tiempo.
FIESTAS
Festival de Música Antigua de Daroca. Durante los primeros días de agosto la ciudad acoge a una selecta nómina de profesores de música y alumnos llegados de todos los continentes para participar en una serie de clases magistrales.
El 7 de marzo, Festividad de Santo Tomás, es también fiesta local. El acto central lo constituye un homenaje a la Tercera Edad de Daroca y la comarca que viene celebrándose desde hace varios años y en el que participan cerca de mil personas.
La Semana Santa. Conjuga el ruido de bombos y tambores en las procesiones con el brillo del enorme y riquísimo patrimonio artístico religioso de la ciudad. Los domingos de Ramos y de Pascua se celebran de forma especial. En el primero permanece la tradición de bendecir palmas y ramas de olivo. El día de Pascua (domingo de Resurrección) se celebra con una comida campestre en el pinar de Daroca, para la cual se preparan los tradicionales "panetes".
A finales de julio se celebra la Feria Medieval, fin de semana festivo en el que convenientemente ataviados, participan buena parte de los vecinos para recuperar el esplendor de la Daroca antigua. El Mercado Medieval y la animación en la calle constituye uno de los fines de semana con más afluencia de visitantes a la Ciudad de Daroca.
Como en tantas otras localidades aragonesas, algunos santos son festejados especialmente en la ciudad:
San Vicente el día 22 de enero, el día de San Valero (29 de enero) y el de San Blas (3 febrero), así como el día de Santa Águeda (5 de febrero) o el sábado más próximo, las mujeres celebran a su Patrona; en estas celebraciones se queman hogueras en las plazas de Daroca y se reparten dulces típicos a los asistentes.
Las gentes del campo también tienen su fiesta el día de San Isidro (15 de Mayo) y San Cristóbal, patrón de los conductores también tienen su propia fiesta popular durante todo un fin de semana, convirtiéndose esta celebración en la antesala de las actividades de verano
Fantástica ciudad aragonesa para pasearla y disfrutarla sin prisas, y descubrir, poco a poco, todas las riquezas que atesora.
INFORMACIÓN DE INTERÉS
LOCALIDADES QUE VISITAR
Albarracín
Bronchales
Molina de Aragón
Orihuela del Tremedal
REPORTAJES
Laguna de Gallocanta
Monasterio de Piedra
RUTA
Por tierras de Teruel