SITUACIÓN
La provincia de Córdoba, una de las ocho que forman la comunidad andaluza, tiene en su capital un claro referente en cuanto a la historia y a las tradiciones se refiere.

El visitante, sin duda, quedará atrapado de su belleza y antes de abandonar la ciudad, ya estará pensando en volver. Así es Córdoba, altiva, fuerte, morena y guapa. Rodeada de agua, flores y jardines que hacen de ella un lugar sin igual.

La ciudad de Córdoba, ocupa 1.245 km2 y tiene una población de más de 300.000 habitantes. El núcleo principal, se encuentra situado en los márgenes del Río Guadalquivir que la atraviesa de este a oeste, formando varios meandros. Al norte del término municipal se encuentra Sierra Morena y al sur una extensa campiña.

QUÉ VISITAR
Córdoba es una ciudad con un ingente legado cultural y monumental. Su situación estratégica, cercana al Río Guadalquivir, antaño navegable, y la herencia de los distintos pueblos asentados en sus ricas tierras, la han convertido en un lugar privilegiado.

Posee el segundo Casco Histórico más grande de Europa, (declarado Patrimonio de la Humanidad, por la Unesco). Es precisamente en él donde se aglomera gran parte de los edificios históricos. En él cabe destacar, el edificio más importante y símbolo de la ciudad, la Mezquita de Córdoba y actual Catedral que, junto al magnífico Puente Romano, forman la más conocida faceta de la ciudad. La visita a la Mezquita es imprescindible, es un lugar que no se puede dejar de ver.

De la época romana pueden encontrarse, además del Puente, el Templo romano (junto al Ayuntamiento), el Teatro romano, el Mausoleo romano, el Foro colonial, el Foro adiectum, el anfiteatro y los restos del Palacio del Emperador Maximiano Hercúleo en el Yacimiento Arqueológico de Cercadilla.

Cerca de la Mezquita-Catedral, se emplaza la antigua Judería, formada por multitud de calles irregulares, tales como la Calleja de las Flores y la Calleja del Pañuelo, en las cuales pueden visitarse la Sinagoga y la Casa de Sefarad. Miles de visitantes recorren la Judería diariamente y es una zona que no debemos dejar de visitar. Piérdete por su callejas y encontrarás lo más auténtico de Córdoba. Seguro que disfrutarás.

En el extremo suroeste del casco antiguo, se encuentra el Alcázar de los Reyes Cristianos, antiguo alojamiento de los reyes y adyacente al mismo se hallan las Caballerizas Reales, lugar de crianza del caballo andaluz. Cerca de las caballerizas se encuentran, junto a la Muralla, los antiguos Baños Califales. El Alcázar también es una visita casi obligada. Súbete a sus Torres y visita sus jardines, llenos de agua y de flores, seguro que encontrarás la paz.

             

A lo largo del río se encuentran los Molinos del Guadalquivir, edificios de la época musulmana que aprovechaban, la fuerza de la corriente, para moler la harina tales como el Molino de la Albolafia, el Molino de la Alegría, el Molino de Martos, el de Enmedio, el de Salmoral, el de San Antonio, el de Hierro, el de Téllez, el de San Rafael y el de Don Tello.

Rodeando el extenso Casco Histórico se sitúa la antigua Muralla romana, de la cual se conservan algunos lienzos; la Puerta de Almodóvar, la Puerta de Sevilla y la Puerta del Puente, que son las tres únicas puertas que se conservan de las trece que tuvo la ciudad; algunas torres como la Torre de la Malmuerta, la Torre de Belén y la Torre de la Puerta del Rincón; y las fortalezas de la Torre de la Calahorra y la Torre de los Donceles.

Repartidos por todo el casco antiguo se encuentran edificios palaciegos tales como el Palacio de Viana, Palacio de la Merced, Palacio de Orive, Palacio de los Aguayos, Palacio de los Luna, Palacio del Duque de Medina Sidonia, Palacio de los Marqueses del Carpio y el Palacio del Marqués de Benamejí, entre otros.

A las afueras de la ciudad, se encuentra el conjunto arqueológico de la ciudad de Madinat Al-Zahra, que constituye junto con la Alhambra de Granada la cumbre de la arquitectura hispanomusulmana. Muy interesante su visita.

GASTRONOMÍA
La gastronomía cordobesa se nutre principalmente de productos del campo y de su vega. De la sierra, viene su cabaña ganadera, y de la parte sur, su magnífico aceite de oliva.

La conjunción de estos ingredientes, todos ellos de primera calidad, hacen de la cocina cordobesa, una fantástica cocina de guisos y estofados. Una cocina, casera y tradicional, muy difícil de olvidar.

En ella destaca su influencia musulmana, como el uso de las especias (orégano, hierbabuena, estragón), o la utilización de alimentos introducidos por los árabes, como el arroz, la espinaca, la berenjena, o la naranja amarga y también a la elaboración de sus dulces.

Platos típicos de Córdoba, que no hay que perderse, son: el Rabo de Toro, el Salmorejo, el Flamenquín, el Pisto, las Berenjenas fritas con miel, el Perol, el jamón del Valle de los Pedroches o el Pastel cordobés, sin olvidar las Tapas, el tapeo es una muy buena costumbre en Córdoba, ensaladilla, pisto, caracoles, etc. acompañado todo ello por los magníficos vinos de la provincia, vinos con Denominación de Origen Montilla-Moriles. 

Dos lugares para comer muy especiales son: el Mercado Victoria y el espacio gastronómico de los Patios de la Marquesa. Si podéis, visitarlos, os sorprenderán gratamente.

ARTESANÍA
Joyería. Desde antiguo, Córdoba ha contado con una importante tradición orfebre, remontándose a la época romana. Actualmente, el sector joyero de Córdoba sigue siendo muy importante, con más de un millar de empresas que suponen el 20% del sector industrial de la provincia. 

Cuero. Córdoba es famosa por sus curtidos y por todo tipo de artesanías en cuero; monturas de caballo a cuadros, biombos, pequeños muebles, etc. 

No debemos olvidar, el famoso sombrero cordobés, como una forma de arte, para vestir la cabeza.

FIESTAS
Carnaval (febrero). Se concentra en las calles y plazas del Barrio de San Agustín. Se realiza un Desfile de Carnaval y un concurso de chirigotas y comparsas en el Gran Teatro.

Semana Santa (marzo/abril). En este momento Córdoba tiene en total 35 hermandades, que desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección, se dirigirán hacia el centro de la ciudad dónde se ubica la Carrera Oficial, por dónde tendrán que pasar.

Mayo cordobés. Mayo es el mes grande de Córdoba. Durante este mes se celebran las principales fiestas de Córdoba y por las cuales es ampliamente conocida. A principios de mayo se celebran las Cruces de Mayo.

Durante la segunda y tercera semana de mayo, se celebra el “Festival y Concurso Popular de los Patios” en el cual los participantes abren sus patios, para que puedan ser visitados. Al mismo tiempo se celebra también el “Concurso de Rejas y Balcones”.

Cabe señalar que debido a la popularidad de los Patios cordobeses, éstos permanecen abiertos también en épocas especiales, como Navidad y de Abril a Junio.

También, a partir de la segunda semana, se celebra la Fiesta de “La Cata”. Todas las bodegas cordobesas se reúnen, para ofrecernos sus mejores vinos.

Y naturalmente la Feria de Córdoba, fiesta popular muy visitada, que se celebra la última semana de mayo y cuenta con unas cien casetas con entrada libre para los visitantes. Caballos, baile y diversión. Imprescindible su visita.

EVENTOS DESTACADOS
Mercado Medieval (enero).

Festival de Blues "Ciudad de Córdoba" (mayo).

La Noche Blanca del Flamenco (junio).

Festival Internacional de la Guitarra (julio).

Visita Córdoba, paséate por sus calles y jardines y entróncate con las tradiciones, la cultura y la historia de una de las ciudades más importantes de España.

INFORMACIÓN DE INTERÉS

LOCALIDADES QUE VISITAR
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REPORTAJES
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